«En PAVÉ todo es posible y todo puede ser sorprendente»

Lunes, despierta la semana, la actividad, el ruido. Tus ojos se abren lentamente, volvemos a la carga. Anécdotas, secretos, recetas y ánimos. Este lunes nos lo comemos con patatas. Este lunes, será un gran lunes.
Bienvenidos a El café de las nueve y veintiuno.
Sí, ya lo sabéis. No nos gusta tomar café solos. Por eso, nos hemos reunido con personas interesantes, que tienen cosas que contarnos, que nos gustan y que están acostumbradas a montar eventos por todo lo alto. ¿El hilo conductor? Las mismas diez preguntas planteadas a distintas personas.

Hoy hablamos con Javier, Gala, Sergey y Moab, el súper equipo de PAVÉ culture cycliste, el paraíso de los amantes del ciclismo. Pavé es un espacio tranquilo, con mucho estilo y un diseño espectacular.

Javier es el artífice del proyecto. Convirtió su sueño en realidad y sigue manteniéndolo despierto. Ha creado, junto con su equipo, un concepto de tienda que les permite jugar con el espacio y adecuarlo para eventos… «En PAVÉ todo es posible y todo puede ser sorprendente».

Sergey, ex profesional del ciclismo es el encargado de taller. Una versión armenia de McGyver. El hombre de las soluciones.

Gala es la sweet side of PAVÉ. Desde el primer día sosteniendo la locura de Javier y aderezando sus nervios. Cada día con un protagonismo más activo. El día menos pensado acabará montando una bici.

Moab es el verdadero patron de PAVÉ. Se pasa el día estirado, controlando y radiografiando a cada uno de los clientes. Su excitación toca los niveles más altos cuando ve que entra un cliente de su lista de MUY BUENOS AMIGOS. Para estar en ella, sólo hay que traerle una chuchería perruna… y por un trozo de jamón te puede llegar a danzar el baile de San Vito.

Javier nos cuenta diez secretos que hacen de PAVÉ una tienda tan auténtica…

1. Trabajas para… todo aquel que cruza la puerta de PAVÉ. Nuestro cometido es darle la bienvenida y hacer que su paso por la tienda sea una suma de emociones.

2. Un evento es la mejor solución cuando… uno está empachado del silencio y soledad.

3. Lo más divertido que te ha pasado… hace unos cuantos meses la editorial Cultura Ciclista publicó el libro “Un hombre en fuga”. El libro trata sobre Marco Pantani y en la portada aparece un retrato del fallecido ciclista. Un cliente nos compró el libro, me pidió un bolígrafo. Se dirigió a otro cliente que estaba en la tienda. Abrió el libro, le extendió el bolígrafo y le pidió por favor que se lo firmara. ¡Lo había confundido con Marco Pantani!

4. Es imprescindible… estar comprometido con lo que uno hace, hacer del trabajo una de nuestras mayores ilusiones, perder el vértigo, despojarse del miedo y avanzar con convencimiento hacia aquello en lo que creemos.

5. Nunca olvidarás el día que… me dieron el alta en Bellvitge y regresaba a casa. Mis padres prepararon la mesa. Y allí estábamos sentados mi padre, mi madre, mi hermana y Gala (por aquel entonces mi novia y hoy mi esposa, mi flamante esposa, mi dulce esposa), disfrutando de la cotidianidad que nos brinda la mesa de mamá. De repente sonó el teléfono. Mi hermana se levantó y contestó: “Llaman de Bellvitge”.

Cedió el auricular a mi madre. La conversación duró apenas unos segundos. Sus ojos se cristalizaron, le pidió a mi padre que por favor abriese una botella de cava y que brindáramos. ¡Los resultados de la biopsia eran buenos y estaba fuera de peligro!

6. Brindas con… alegría y acompaño la sonrisa con cava.

7. El día antes del evento… uno no deja de repasar por activa y por pasiva cada uno de los elementos que compondrán y darán forma a la jornada. Todo pasa de una manera muy acelerada, un repaso en diagonal, un chequeo visual a una realidad virtual.

8. Y el día después… uno repasa en slow motion lo que dio de sí el día. Todo es más pausado, todo es más relajado. Y la película acaba con un brindis por el trabajo.

9. El aperitivo que no puede faltar es… en el transcurso de una salida en bici de domingo la parada en algún café perdido de algún pueblo olvidado, sentarse en la terraza y pedir un bocadillo de tortilla acompañado de una Coca-cola. Desde luego no es nada glamuroso, pero en ese preciso instante y en ese lugar preciso es lo más apetecible.

10. Lo que más te gusta de 21 de Marzo es… su capacidad para generar momentos únicos estando muy activos a lo largo de todo el evento y sin embargo para quienes disfrutamos de su puesta en escena y de su comida nos da la sensación de estar solos. Esa magia es fantástica.